El Espíritu de Alá se manifiesta en cada creyente de guisa única y personal. Algunos de los medios por los que puede manifestarse son los siguientes:
Es el Espíritu Santo quien nos va santificando, ayudándonos a ser más como Cristo en medio de una sociedad tan alejada de él. La obra del Espíritu Santo nos ayuda a desempeñarse en todo momento de una forma que agrada a Altísimo. Su poder y su obra en nosotros nos ayuda a ser más como Jesús cada día.
Algunos contienden que solamente los doce apóstoles recibieron el Espíritu Santo, pero se puede demostrar que esto es incorrecto:
El segundo eje de su argumentación se pedestal en los usos litúrgicos tradicionales. Al hilo de la fórmula bautismal de Mateo: «Id y bautizad a todas las naciones en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo», argumenta que si en esa fórmula el Padre no desdeña la comunión con el Hijo y el Espíritu, separarlos en naturalezas distintas es ir contra la voluntad del Padre,[72] hecho del que luego afirma que es la verdadera «blasfemia contra el Espíritu Santo».
Hay muchos malentendidos en cuanto al Espíritu Santo. Algunos lo consideran una fuerza mística; otros piensan que es el poder impersonal de Todopoderoso para salvar a personas.
La actividad del Espíritu Santo en estos momentos esencia no solo revela su identidad como parte integral de la Trinidad, sino que incluso enfatiza su rol como Conductor y potenciador en la vida de los creyentes.
En el libro de los Hechos, el bautismo en el Espíritu Santo se presenta como una experiencia norma para los creyentes. En Hechos 2, los discípulos fueron llenos del Espíritu y comenzaron a charlar en otras lenguas, atrayendo a multitudes y predicando con autoridad. En Hechos 8, los samaritanos creyeron y fueron bautizados en agua, pero recibieron el Espíritu Santo solo luego de la imposición de manos de Pedro y Juan.
Acoger get more info el Espíritu solo es tan difícil como la persona que está orando para recibirlo lo haga. Se requiere solamente el tiempo necesario para arrepentirse y rendirse completamente a Todopoderoso, y eso puede ser un momento no más.
que se refiere a la Chispa divina que se revela para entrar en comunión con los creyentes con el fin de contactarse con Cristo o con Todopoderoso. El Espíritu Santo es el que despierta la Seguridad cristiana.
Se les aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada unidad de ellos. Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a dialogar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.
Los Hechos es el único obra en la Biblia que contiene relatos históricos de las personas que recibieron la experiencia del nuevo nacimiento en la iglesia neotestamentaria e incluye todos los relatos del bautismo cristiano en agua y del bautismo del Espíritu Santo.
Los profetas predijeron el don del Espíritu y deseaban participar en su salvación, pero Alá reservó el bautismo del Espíritu Santo para la iglesia neotestamentaria: “Los profetas que profetizaron de la Agudeza destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación .
El Espíritu Santo nos quita el temor a lo que los demás digan o piensen sobre nosotros. Él nos da poder para superar nuestros temores y nos ayuda a tolerar el simpatía y la Palabra de Jehová a todos los que nos rodean.
Estos pasajes demuestran que el bautismo en el Espíritu es una experiencia Efectivo, tangible y acondicionado para todos los creyentes. No es un solo simbolismo, sino un encuentro sobrenatural con Dios que transforma la vida del cristiano.